Los sistemas de pensiones son mecanismos de protección social que tienen como objetivo general proveer un seguro de ingresos que permita mantener un nivel de consumo adecuado a lo largo del ciclo de vida de las personas. En este sentido, los países implementan el sistema de pensiones que mejor se ajuste a su contexto socioeconómico, considerando las necesidades y particularidades de su población.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OECD) y el Banco Mundial, la estructura de un sistema de pensiones puede considerar tres niveles fundamentales:
- En primer lugar, se encuentran los esquemas no contributivos, que brindan protección social a las personas mayores y están basados en solidaridad. En el caso de Chile, por ejemplo, se encuentra la Pensión Garantizada Universal, que busca asegurar una pensión mínima para aquellos que no alcanzan a cubrir los requisitos de los esquemas contributivos.
- En segundo lugar, se encuentran los esquemas contributivos obligatorios, que implican un ahorro obligatorio por parte de los trabajadores y brindan mayores beneficios de pensión. En el caso de Chile, se encuentran los ahorros obligatorios en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), que se basan en los ingresos de los trabajadores y tienen como objetivo principal garantizar una pensión adecuada al momento de jubilarse.
- Por último, en un tercer nivel, se encuentran los esquemas contributivos voluntarios, que permiten a aquellos con capacidad económica realizar ahorros adicionales para complementar su pensión. Estos esquemas se basan en la libre elección de los individuos y pueden estar asociados a planes individuales de ahorro o aportaciones basadas en los ingresos.
En resumen, la estructura de un sistema de pensiones puede variar de un país a otro, pero en general busca garantizar un nivel de protección social adecuado para las personas en su etapa de jubilación. La combinación de esquemas no contributivos, contributivos obligatorios y contributivos voluntarios permite abordar las distintas realidades y necesidades de la población, asegurando así un sistema de pensiones más completo y equitativo.